El segundo disco de Red Jesus es un viaje oscilante de psicodelia pop perpetrado con un fin específico: sacudirse hasta la última miga de divinidad. Por eso No Hago Milagros, en contraposición con la poesía épica, narra las desventuras de un antihéroe. Un hombre común y corriente que se equivoca, que pide perdón, que se engaña y se regaña a así mismo. Que cae, que se levanta, que ríe y que se muere de vergüenza de sacar a bailar a la chica que le gusta.

Sí, este Jesús es humano y no es más hijo de Dios que un cirujano plástico o que el que reparte el periódico en la esquina. En No Hago Milagros el sarcasmo, la extravagancia y las apologías religiosas están a la orden del día. Una pieza en esencia íntima, pero expresada con arrebato a través de brochazos pop, urbanos y electrónicos, ritmos orgánicos, melodías pegajosas y mucha, mucha psicodelia.