Esta película es del año pasado, pero apenas la vi porque la acaban de subir a Netflix. La verdad me dio algo de hueva darle play, sin embargo como ya he visto todas las que me llaman la atención , me di la oportunidad de disfrutarla, sobre todo porque es muy interesante la psicología de un psicópata

La directora es Amber Sealey. Los protagonistas son  el famoso y carismático Elijah Wood, como el agente Bill Hagmaier, y Luke Kirby quien interpreta de forma extraordinaria a Ted Bundy, porque realmente percibes su locura durante todo el largometraje, sus expresiones son tétricas, al observar sus ojos, sus gestos, el ritmo de su voz dan escalofríos, cree uno en realidad que sí es el famoso psicópata, aparte de que su parecido es realmente significativo, se parece mucho. Sus facciones son similares, su peinado es igualito, no sé si su lenguaje corporal también lo sea, pero lo hace de maravilla.

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Yo desconocía la historia de Ted, sabía que fue un asesino en serie pero desconocía que lo habían condenado a muerte. El guión se centra en la relación que forjó el agente Bill con Bundy, pues el federal del FBI, ha sido uno de los perfiladores más importantes de todos los tiempos. Es así que empezó a tener una relación con Ted para indagar más sobre este tipo de criminales. Ted Bundy se había resistido a dar entrevistas, sobre todo a los del FBI. Sin embargo el agente Bill se ganó su confianza, hasta el punto de que el criminal lo considero su amigo.

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La película muestra la frialdad, la  inteligencia, la astucia de este tipo de personas antisociales. A pesar de ser unos desgraciados, de ser obscuros en todas las áreas de sus vidas, poseen  habilidades que un neurotipico como yo quisiera tener, como la confianza, la mesura, la templanza, la perseverancia, la organización. Realmente los asesinos seriales son tan encantadores  que por eso los utilizan como tema central de innumerables series y películas. Son unos mentirosos patológicos, unos seductores empedernidos para lograr sus objetivos macabros.

A pesar de que el desenlace se sabe, no importa, pues a lo largo de la obra encuentras emoción, al observar como una persona perturbada logra tener un vínculo con un agente del FBI.