Me gustan estas miniseries de investigación, son bastante emocionantes. Las van relatando con suspenso, te van dando detalles poco a poco, con un inicio, desarrollo y desenlace, como si fuese un largometraje
Aquí si aplica que la realidad supera a la ficción, sobre todo cualquier película policiaca. Dirigida por Skye Borgman (que la neta no sé quién es), y protagonizada realmente por Anthony Templet.
Al inicio plantean como sucedió el homicidio. Anthony marca al 911 para avisar que acababa de matar a su padre (por eso se llama así la miniserie). En el call center del 911 no le creen, pues el da el aviso de forma muy ecuánime, muy mesurada. Con toda razón en emergencias son algo incrédulos, ya que reciben muchas llamadas falsas al día, representando pérdida de tiempo, y pérdida recursos.
Sinceramente durante el primer capítulo de los tres, mi conjetura fue que el adolescente de 17 años de edad, es un psicópata, pues describen su personalidad como introvertida, inspiraba falta de sentimientos como los asesinos seriales. Sin embargo, paulatinamente vas descubriendo que el asesinato era justo. Ponen sobre la mesa ambas caras, ambas partes, ambas defensas, pues los abogados dan pruebas de los motivos que llevaron a Anthony a cometer homicidio. A pesar de que es un asesinato sin lugar a dudas, el joven tenía demasiados motivos para hacerlo, pues el padre era un delincuente doméstico, que tenía varios antecedentes registrados. Una de las demandantes fue la mamá del chico, quien había sido maltratada por este señor sociópata, sobre todo cuando se robó al chico a la edad de cinco años.
La neta no quiero spoilear más porque quiero que disfruten los tres capítulos igual que yo. Mientras estás viendo el documental, no te da tiempo para pensar en otra cosa, sino que vas sumergiéndote en el chisme, deseas saber inmediatamente cuál fue el desenlace, te identificas con el chavo y quieres que salga libre, que no lo culpen del asesinato; si tenemos principios de justicia, consideramos que el chico aparte de haber tenido los huevos, fue en defensa propia. Lo mato porque su padre le robo la infancia, le mato sus sentimientos, ilusiones y todo contacto con la realidad.
Si les gusta el chisme, les va encantar; si les gustan los temas policiacos de detectives, les va a fascinar; y si no les agrada lo anterior, la miniserie los va a mantener en suspenso.
